El trabajo híbrido y totalmente remoto está aquí para quedarse, y por eso el bienestar digital es importante.
Clic. Pausa. Desplázate. Repite. Este es el patrón que llena el 38% de nuestro tiempo despiertos. El cambio hacia el trabajo remoto e híbrido que se produjo como resultado de la pandemia difuminó los límites entre el trabajo y vida personal como nunca antes. Más tiempo dedicado a Zoom llevó a la fatiga; más fatiga contribuyó a menor productividad; menor productividad resultó en más horas después del trabajo intentando ponerse al día, lo que creó un ciclo poco virtuoso de comunicaciones de trabajo a todas horas del día y de la noche.
¿Sientes que tu tiempo frente a la pantalla ha aumentado en solo unos años? Si es así, no estás solo. Desde 2020, el promedio diario de tiempo frente a la pantalla de empleados aumentó 5 horas por persona de sus niveles prepandémicos. ¿Acaso es de extrañar que la gente esté ‘renunciando silenciosamente’ en medio de la ‘gran renuncia’? Este estado actual de conectividad constante está afectando el bienestar y la productividad de los empleados. No solo no es sostenible, sencillamente no es un buen negocio. Algunas de las principales empresas del mundo están utilizando el bienestar digital como estrategia para ayudar a reimaginar el impacto de la tecnología en los empleados, tanto en el trabajo como en casa.
En el trabajo, nuestra evaluación Insights, proporciona una perspectiva relevante y precisa del bienestar de los empleados considerando factores que no aparecen en las encuestas de satisfacción tradicionales, pero que desempeñan papeles silenciosos y significativos en la experiencia del empleado.
En casa, la encuesta sobre el florecimiento digital puede orientar los hábitos personales de tiempo frente a la pantalla a lo largo de un ciclo que va desde la desintoxicación digital a la adicción digital, todo ello considerando su impacto en las 8 dimensiones de la rueda de florecimiento digital.
Juntos, proporcionan un mapa que orienta a individuos y organizaciones en un viaje de vida-tecnología más saludable. Así que, mientras seguimos navegando por la vida y el trabajo en la era digital, pregúntate: ¿no necesitamos todos un poco de bienestar digital?
Por Tyler Rice, Amy Blankson, y Nina Hersher
Instituto del Bienestar Digital
www.digitalwellnessinstitute.com